Reseña: Cress

Título: Cress

Título original: -

Saga a la que pertenece: Crónicas Lunares 3

Autora: Marissa Meyer

Editorial: Montena

Nº de páginas: 577 págs.

ISBN: 9788490437117

Había una vez… una joven de cabello largo y dorado que fue encerrada en una torre sin puertas ni escaleras. 

Cinder, Thorne, Scarlet y Wolf son los fugitivos más buscados. Juntos, planean destronar a la reina Levana y destruir su armada. Todas sus esperanzas están puestas en Cress, una joven hacker que se encuentra atrapada en un satélite. Durante toda su vida, estuvo rodeada de pantallas, observando, espiando. Lo único con lo que siempre soñó fue con ser libre. Y finalmente logra escapar…pero el precio que deberá pagar es más alto de lo que ella imagina. Mientras tanto, Levana está empecinada en que nada ni nadie le arruine su boda con el emperador Kai… ¿Qué será capaz de hacer con tal de cumplir su objetivo? 

Encontrar una saga que todavía en la tercera parte enganche es para considerarlo un milagro. Hay que decir que esta saga cuenta con la ventaja de que está basado en cuentos infantiles, historias que adoro desde pequeñita.

Como lleva siendo costumbre, este libro se inicia justo donde se queda el anterior. Cinder continúa siendo la fugitiva más buscada. Por ello, para huir de todos, en especial de la reina Levana, se embarca en la Rampion, la nave robada por Thorne, junto con el capitán Thorne, Scarlet y Lobo (los protagonistas de Scarlet). Entre los cuatro, buscarán la manera de impedir la unión entre la reina Levana y el emperador Kai. Para conseguirlo, deberán primero ayudar a la única persona que parece tener la información para ayudarles: Cress. Cress es una joven hacker al servicio de Levana que está apresada en un pequeño satélite del que no puede salir. Harta de esa vida que lleva, decide ayudar a Cinder y traicionar todo lo que ha conocido hasta ahora, no solo porque considera a la joven mecánica la única esperanza de la tierra, sino porque no quiere tener que entregar a su amado capitán Thorne.

Con la boda cada día más cerca, resulta indispensable salvar a Cress de su cautiverio para que pueda ayudar a acabar con los planes de la reina y evitar así que la Tierra pase a estar controlada por la Luna.

Hasta ahora, de los personajes que me he encontrado en la tetralogía, Cress es la que más ternura me ha causado, porque los años de cautiverio la han hecho torpe para las relaciones sociales y muy crédula, lo que puede ser bueno en muchas ocasiones, pero mortal en tiempos de guerra. Por suerte, a lo largo del libro sufre una transformación y va madurando, volviéndose una chica capaz de enfrentar cualquier problema que se le ponga por delante.

Los demás personajes continúan en su línea: todos tratan de ayudar a Cinder a acabar con la conquista lunar a la Tierra, impidiendo que la reina Levana se haga con todo su planeta y empiece una tiranía igual que la de la Luna.

A pesar de ser el volumen más largo hasta ahora de la tetralogía, la lectura es igual de ágil que en anteriores volúmenes, leyéndose súper rápido y enganchándote a cada página hasta el final del libro, queriendo más y más. En breves también veréis reseña de la última parte, que espero no se jorobe en la última entrega y sea igual de genial que hasta ahora y que Marissa Meyer me haga un por siempre felices <3

Espero que todos los que lo hayáis leído estéis tan entusiasmados como yo por leer la última parte, dejadme en comentarios que os ha parecido la tetralogía hasta ahora y que esperáis que ocurra en el último volumen!!!

Trate de encontrar algo que le haga feliz. Su vida no va a ser más fácil una vez que la reina Levana sea su esposa. Si tuviera siquiera una pequeña cosa que le trajera felicidad, o la esperanza de que las cosas podrían algún día ser mejor, entonces tal vez eso sería suficiente para sostenerlo. De lo contrario, me temo que será muy fácil para la reina ganar.

Tal vez no hay tal cosa como el destino. Tal vez son sólo las oportunidades que nos dan, y lo que hacemos con ellas. Estoy empezando a pensar que tal vez los grandes y épicos romances no ocurren por casualidad. Tenemos que hacerlos nosotros mismos.